El sobrepeso y la obesidad son problemas de salud frecuentes en la población actual, considerados como la epidemia de nuestro siglo. Este hecho, unido a la presión de la sociedad por conseguir una imagen dentro de los “cánones” de belleza actuales, hace que exista un interés creciente de la población por mantener o conseguir un peso adecuado. Para conseguirlo, debemos modificar nuestros hábitos de alimentación y de ejercicio físico, entre otras cosas. Pero muchos pacientes buscan resultados rápidos y sin esfuerzo sin pensar en las consecuencias que esto puede tener en su salud.
En los últimos años han aparecido múltiples ejemplos de “dietas milagro”, la mayor parte de ellas inapropiadas, sensacionalistas y muy distantes de las recomendaciones dietéticas actuales, pero que debido a la presión de los medios han tenido muchos seguidores, jugando de este modo con la salud de los individuos y en las que, en la mayor parte de los casos, sólo buscan el beneficio económico, siendo prescritas por profesionales no cualificados o ajenos al mundo de la nutrición.
Es importante saber detectar cuándo nos están intentando “vender” una dieta milagro, y según la Fundación Española de Dietistas-Nutricionistas, existen unos puntos básicos que podemos tener en cuenta para detectarla:
* Prometen resultados rápidos y sin esfuerzo
* Prometen resultados asombrosos o “mágicos” (una cura milagrosa, un ingrediente secreto, un antiguo remedio, un quemador de grasas…)
* Prohíbe el consumo de un alimento o un grupo de alimentos
* Ofrece listados de alimentos “buenos” y “malos”
* Presenta relatos, historias o testimonios para aportar credibilidad.
* Se puede auto administrar o implementar sin la participación de profesionales sanitarios cualificados, tipo “hágalo usted mismo”
* Atribuye “proezas” a determinados alimentos o nutrientes
* Promueve consumir preparados que vende quien promueve la dieta o el método.
* Contiene afirmaciones que sugieren que los preparados son “seguros” porque son “naturales” y suelen tener un coste muy elevado.
Nuestro consejo es que nos alejemos de este tipo de regímenes dietéticos, ya que, sólo la educación dietética con la ayuda de un profesional cualificado, nos ayudará a establecer hábitos alimenticios y de estilo de vida saludables con el fin de perder peso y mantener a largo plazo los resultados conseguidos.
Marta Milla Tobarra
Dietista-Nutricionista en Eborasalud – Talavera de la Reina