Los hongos en los pies son más frecuentes en verano. La causa principal es que habitualmente habitan en zonas húmedas, como piscinas y duchas. No obstante, las personas que van al gimnasio y se duchan en zonas comunes a lo largo del año también pueden contraer los hongos.
Las infecciones por hongos en los pies o también conocidas como micosis, se presentan con una picazón muy molesta que puede llegar a desesperar a quien los padece; pero además de afectar los pies, también afecta las uñas llegando hasta el punto de destruirlas por completo.
Una piel infectada por hongos suele estar reseca, irritada o enrojecida, acompañada en ocasiones por picor o escozor. ¿Cómo podemos actuar contra ellos?
El tratamiento de los hongos en los pies es mediante vía tópica con antifúngicos de amplio espectro, pero no hay que olvidar desinfectar también las zonas donde el pie puede haber entrado en contacto. Para prevenir la transmisión o la reinfección de estos hongos es importante desinfectar nuestro calzado así como mantener una buena higiene de las superficies que pisamos. Además, debemos seguir unas sencillas pautas:
1.- Andar con calzado el máximo tiempo posible; si se anda con chanclas, intentar secar los pies para evitar el contagio.
2.- Utilizar calcetines de neopreno para la piscina. Estos evitan en cierto modo el contagio pero tampoco al 100%.
3.- Cuanto menos tiempo esté húmedo el pie, mejor. Hay que secarse lo antes posible.
4.- No automedicarse y acudir al médico de familia siempre.